EL FOLCLORE PERUANO.-


Por: Alfredo Estrada Zavaleta.

En Junio se celebra el Día del Padre y del Campesino, como justo reconocimiento a los nobles sentimientos cultivados en la familia y en la sacrificada actividad agrícola, que posibilitan lograr mejores condiciones de vida a los pobladores y brindar una Sociedad valorada en sus tradiciones y costumbres.

Los vestigios de las antiguas culturas y el imperio inca, registran pues en el campo musical, muy interesantes experiencias y aportes; ya a través del vigoroso canto y el empleo de diferentes instrumentos aerófonos y de percusión, que utilizaron en sus conquistas y en la reverencia a sus dioses. En si la estructura modal pentatónica y los patrones rítmicos empleados en su momento; impulsaron esa visión de la realidad, con sus alegrías y tristezas, evocando en sus poesías, un sinnúmero de géneros literarios sobre el amor y su entorno.

En la colonia y el virreinato del Perú, el yaraví y el huayno; estimaron con suerte esa fuente de liberación y coraje, que les animó en sus labores y que a la par permitió conservar en cierta forma, ese legado de grandiosidad y temple ante la continua explotación de las riquezas en el país.

Hoy con la variedad de estilos, vestuario, soporte instrumental, coreografías y otros aspectos artisticos; la música apunta a otro contexto ya comercial- competitivo, que difunden los programas televisivos, radiales y la red con gran éxito, llevando al exterior las manifestaciones de este mestizaje, ya propuestas de melodías y adaptaciones, que el pueblo acoge con su masiva presencia en los conciertos y festividades regionales.

Felicidades a los padres responsables y gracias a nuestros hermanos campesinos, por seguir labrando la tierra y ofreciéndonos esos frutos propios del Incario.-