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Wednesday, February 13, 2008

MERITOCRACIA O UN SIMPLE CUADRO DE CALIFICATIVOS.-

Por: Alfredo Estrada Zavaleta.-

En los últimos días, como una suerte de los continuos experimentos de laboratorio y formas del manejo informativo, muy provechosos para algunos; se viene gestando una nueva alegoría política, que va en razón del D.S.004-2008-ED y según reza la imaginación, procura el establecimiento de la Meritocracia, tan conocida en la suerte de ciertos lideres, cuya manera de vida es: Engañar al pueblo, cuando en otras latitudes su capacidad no da más.-

A este punto, se han puesto en el tapete social y laboral, propuestas que tienden a revertir tal mecanismo; ello desde: La promulgación de Ordenanzas Regionales que rechazan la imposición del tercio superior, el absurdo de mayores exigencias que las del Concurso Publico para Nombramiento de Docentes y tal vez lo mas importante, la idoneidad profesional de quienes alientan este propósito y ocupan cargos simplemente por una servil militancia.-

El tema fundamental de la evaluación y calificaciones en los distintos niveles a través de los años, ha sido muy polémico y complejo y sigue en esa brecha; pues parte de la calidad del docente, metodología de aprendizaje y su probidad en la elaboración de los instrumentos y materiales conveniente para lograr un resultado positivo en la formación del educando. En una visión objetiva, real y participativa, debe ser el fin de un proceso concreto y significativo, que permita orientar al alumno, proporcionarle ese interés manifiesto en aprender e investigar y no disponerlo como un sujeto pasivo, dependiente y memorista. Por ello el Maestro, asume con mucho cuidado esta practica; dado que no solo es la administración de una prueba momentánea, para llenar los casilleros de un Registro o con un rango limite le reporte ese orgullo de creerse el único y mejor de los intelectuales o científicos; sino es el deseo de apoyar a sus estudiantes para que estos persistan en ampliar las fronteras del conocimiento en el empleo de sus habilidades y destrezas, es también la fortuna del trabajo logrado con esmero y dedicación, afrontando grandes retos y adaptándose a las concepciones del mundo moderno.-

Sin embargo, lejos de estas estrategias formativas y democráticas en el terreno educativo, ya enseñanza general y superior; la mayoría de la población, siempre ha observado cuestiones que van mas allá de una evaluación justa e ideal y que se comprueban después en los calificativos y cargos asumidos por algunos. Por ello creo yo, que la meritocracia en nuestro país es tan inestable como un castillo de naipes y vale tan solo por la influencia y las recomendaciones; así en los colegios y universidades, con algunas excepciones en los docentes, la evaluación se considera en los supuestos del: Status económico-social, la presión de los dirigentes políticos, la adulación del circulo que rodea al docente, la consabida copia o las fichas, el seudo prestigio, la comodidad y menor esfuerzo para efectuar y cumplir con esta etapa, la pésima trabajo educativo en el proceso de enseñanza aprendizaje y , los “favores” e “intereses creados para ocupar otros puestos”.-

Por otro lado, es de igual manera muy sospechosa la inacción del Ministerio, cuando compete a ciertos profesores intitulados nombrados como interinos, que pese a las prorrogas para realizar sus estudios superiores, no han cumplido existiendo las facilidades; mas les favorece seguir en esa condición, dado que nunca podrán ser removidos y gozaran de todos los beneficios, mientras otros profesionales luchan y enfrentan numerosas trabas en la Administración Publica y prefieren apostar por las Instituciones Privadas.-

Muchos genios de la humanidad, en su momento no ocuparon los primeros puestos, tal vez por una insustancial formación educativa; pero con el tiempo brillaron en el universo de los eventos, conquistas y adelantos tecnológicos. En Perú, hasta la fecha no existe un Premio Nobel y generalmente pocos Monumentos, Instituciones y otras llevan el nombre de quienes alcanzaron sus proyectos y resultados por propio esfuerzo; mas los políticos abundan y sus fracasos también. Esperemos por tan unas acciones mas edificantes.-

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